Snail mail o happy mail

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Seguro que estáis aburridas de encontrar en el buzón propaganda, recibos y más propaganda de nuevo. Y es que vivimos en la época de la inmediatez y se está perdiendo la esencia de lo elaborado a mano con todo el cariño, y desde luego, bajo mi punto de vista, una carta lo es. En sus líneas tratas de personalizar al máximo lo que escribes interesándote por esa persona y su familia. 

No hay nada como la maravillosa sensación de recibir una carta, y saber que quien te escribe se ha tomado la molestia de dedicar unos valiosos instantes a ti. Suena egoísta sí, pero no me negaréis que en el fondo a todos nos gusta que nos hagan regalitos, y al fin y al cabo, una carta en cierto modo lo es.

Pues bien, el snail mail o happy mail es en esencia eso... recuperar la tradición de escribir una carta hecha obra de arte o si lo preferís una obra de arte hecha carta. Pero lo bonito de este tipo de correo no es eso, sino que el intercambio postal se realiza, por lo general, entre extraños. 

Bueno, creo que estoy divagando más de la cuenta... para que lo comprendáis mejor, os dejo aquí el enlace del blog Artcreatiu donde se habla con más detalle sobre ello.

De todos modos, no podría dar por acabado este post, sin mencionar el blog Diario de Loneta, pues precisamente a raíz de una de sus últimas entradas he conocido el término, lo cual me ha llevado a indagar en la red sobre su verdadero significado.

Espero que esta información os resulte útil y os pongais a la faena con entusiasmo. Yo me estoy planteando seriamente llevarlo a cabo con mis amigas de toda la vida. Creo que puede ser una sorpresa bonita.

En fin, nos leemos. Un abrazo.